
Hoy que sabemos de qué se trata una pandemia, insólitamente seguimos conviviendo con pulgas y roedores.
Una de las pandemias más devastadoras en la historia de la humanidad, “la peste bubónica” fue causada por la bacteria Yersinia Pestis, que diezmó a más de un tercio de la población europea en la antigüedad, donde las responsables de su transmisión fueron las actualmente presentes ratas y pulgas. Es por ello que aunque los siglos pasen y la ciencia avance se siguen presentando problemas a la salud vinculados a las pulgas y por ello dedicamos estas líneas a esta plaga. Se identificaron más de 1800 especies de pulgas y son importantes por transmitir enfermedades como el tifus, tenias, peste negra y como ya mencionamos la peste bubónica entre otras.
Las pulgas, también conocidas como sifonápteros (Siphonaptera, del griego antiguo ίφων síphōn, “canal, tubo”, y ἄπτερα áptera, “sin alas”), son artrópodos invertebrados pequeños que no poseen de alas y son muy ágiles, de color generalmente oscuro, cuentan con un aparato bucal de tubos especialmente adaptado para poder alimentarse.
Estos parásitos externos son hematófagos es decir que se alimentan de la sangre de diversos “huéspedes” humanos y animales. Las pulgas se desplazan mediante largos saltos en proporción a su tamaño pudiendo así alcanzar fácilmente a nuevos huéspedes gracias a que en sus articulaciones poseen resortes de resilina, la proteína más elástica conocida.
Tienen el cuerpo comprimido lateralmente, lo que les permite desplazarse con facilidad entre los pelos o plumas del huésped. Tienen las patas largas y las traseras están adaptadas para el salto que puede ser de hasta 18 cm. (centímetros) en dirección vertical y 33 cm. en dirección horizontal. Esto representa una distancia de hasta 200 veces su propia longitud, lo que convierte a las pulgas en el mejor saltador entre los animales en relación con su tamaño corporal. El cuerpo de la pulga es duro, pulido y está cubierto con muchos pelos y espinas cortas dirigidas hacia atrás. Esta característica les asegura un tránsito fluido entre los cabellos del huésped. La dureza de su cuerpo les permite soportar grandes presiones, probablemente como resultado de una adaptación para sobrevivir al rascado, incluso la ejercida por los dedos humanos o garras de mamíferos.
Las pulgas son insectos que tienen metamorfosis completa y pasan por un ciclo vital con fases de huevo, larva, pupa y adulto. El periodo en que se completa el ciclo de huevo a adulto varía de dos semanas a ocho meses dependiendo de la temperatura, humedad, alimento y la especie en particular. Normalmente, tras alimentarse de sangre, la hembra deposita entre 14 y 20 huevos por día, lo que se traduce en más de 500 durante su vida, usualmente sobre el hospedador, perro, gato o roedor. Las diferentes especies de pulgas tienen preferencia, por el perro, gato, o ratón, pero no son específicas de cada animal.
Los huevos depositados sueltos en el pelaje de nuestras mascotas, caen en toda la casa, sobre todo donde el hospedador descansa o duerme: mantas, alfombras, muebles tapizados, cuchas, almohadones y ascensores de edificios donde poseen perros y gatos.
Los huevos eclosionan entre dos y catorce días después de la puesta. De ellos salen larvas vermiformes de vida libre. Las larvas se refugian en las grietas, juntas y hendiduras del suelo, a lo largo del piso, bajo los bordes de las alfombras, en muebles o camas dentro de las edificaciones. Si es a la intemperie, el desarrollo tiene lugar en suelos de arena o tierra, bajo cualquier protección como piedras, plantas, arbustos, etc. donde el hospedador puede descansar o dormir. La arena y pedregullo son muy favorables para el desarrollo larval.
Las larvas son ciegas, evitan la luz, pasan por tres mudas larvarias y tardan de una semana a varios meses en desarrollarse. Su alimento se basa en piel muerta, pelos, plumas y todo resto orgánico dado que las larvas no pican. Las pupas maduran al estado de adultos dentro de un capullo o pupa tejido por la larva, el cual adhieren al pelo de mascotas, fibras de alfombras, polvo, trozos de hierba y otros restos. En alrededor de cinco a catorce días emergen las pulgas adultas o pueden permanecer en estado latente en el interior del capullo hasta detectar vibración (movimiento de personas o mascotas), presión (el animal hospedador apoyado sobre ellas), calor, humedad o dióxido de carbono). La mayoría de las pulgas pasan el invierno en el estado de larva o pupa, con mejor supervivencia y crecimiento durante inviernos cálidos y húmedos y en la primavera.
Una población de pulgas que habita una vivienda se constituye de un 50 % de huevos, 30 % de larvas, 10 % de pupas y 5 % de adultos. Son estas últimas quienes están en los animales o personas y pican por tener sangre caliente que sirve de alimento. ¡El resto estará repartido por toda la casa!
En la mayor parte de los casos las pulgas son sólo una molestia para sus víctimas. Las personas y animales sufren serias reacciones alérgicas a la saliva de la pulga, manifestadas en erupciones y eritemas. Una de las especies se llama Pulex Irritans a raíz del grado de irritación dermal que provoca.
La picadura de pulga generalmente tiene como consecuencia la presentación de áreas inflamadas y sobre elevadas que producen mucha irritación y picazón, viéndose un solo punto de picadura en el centro. De la observación surge que frecuentemente producen tres ronchas cercanas.
La pulga Pulex Irritans es la más común, estando la del perro Ctenocephalides canis, o la del gato Ctenocephalides felis, pero si bien tienen preferencias, atacan indistintamente a humanos, perros, gatos y roedores, intercambiando y transmitiendo enfermedades, que a pesar de los siglos transcurridos, aún no han desaparecido, siendo flagelos para la humanidad.
Bibliografía:
Universidad de Purdue -Guía científica de Truman-USA
Comunidad Virtual de Entomología ¿Cuantos insectos existen en la península ibérica?
Fleas HYG-2081-97 William F Lyon, Ohio State University, entomología
Beck, Wieland; Stickel, Melanie (2008-10). “Comportamiento migratorio de Ctenocephalides felis en gatos y en sus camas” Semanario clínico vienés.